
De un Sueño Inesperado a una Realidad Increíble: Mi Historia con Liso Saludable.
Soy Mafe, fundadora de Liso Saludable, un sueño que nació sin que yo misma lo planeara.
En 2016, mi familia y yo estábamos pasando por un momento económico muy difícil. La necesidad me llevó a buscar alternativas, y encontré en los alisados una oportunidad para salir adelante. Al principio, iba de casa en casa, atendiendo a familiares y amigas. Nunca imaginé que aquello que empezó como una solución temporal terminaría convirtiéndose en mi gran propósito de vida.
Poco a poco, el voz a voz en Medellín hizo su magia. La gente comenzó a reconocerme como “Mafe, la de los alisados”, y cada vez tenía más clientas. Llegó un punto en el que era imposible seguir haciendo domicilios: mi agenda estaba llena, y trasladarme de un lugar a otro era un reto. Fue entonces cuando, con el apoyo incondicional de mi mamá, mis hermanas y mi esposo, abrimos nuestro primer pequeño local.
Ese espacio se llenaba tanto que un día el dueño nos pidió que nos mudáramos. Aunque en su momento fue un golpe duro, hoy lo veo como una bendición disfrazada. Nos vimos obligados a buscar un lugar más grande… y sin saberlo, estábamos dando el primer paso hacia algo mucho más grande.
Hoy, Liso Saludable tiene 9 sedes en Colombia y con mucho orgullo hemos cruzado fronteras con nuestra sede número 10 en Miami. Pero más allá del crecimiento y la expansión, lo que realmente me llena el alma es el impacto que tenemos en la vida de otras mujeres.

Desde el principio, tuvimos claro que queríamos hacer algo diferente. No buscamos ser el alisado más económico ni el más masivo, tampoco nos obsesiona la idea de un liso perfecto. Nuestro propósito es brindar bienestar, salud y belleza real. Creemos que el cabello es una carta de presentación, y más que transformar melenas, buscamos empoderar mujeres.
Liso Saludable es mucho más que un centro de alisados; es una empresa con propósito. Creemos en el poder femenino y en el impacto de brindar empleo digno, estable y con beneficios reales. Muchas de las oportunidades que hoy ofrecemos son difíciles de encontrar en otros lugares, y eso nos motiva a seguir creciendo. Sabemos que cuando las mujeres tienen oportunidades, brillan, transforman sus vidas y dejan huella en su entorno.
Estos años han sido de trabajo duro, noches sin dormir, miedos, aprendizajes y momentos inolvidables. Nada ha sido fácil, pero todo ha valido la pena. Cada paso ha sido un recordatorio de que los sueños no llegan de la nada, sino que se construyen con pasión, disciplina y perseverancia.
Y lo mejor de todo… esto es solo el comienzo.
Gracias a cada persona que ha sido parte de esta historia, a quienes han confiado en nosotros y han creído en nuestro propósito. Sin ustedes, Liso Saludable no sería lo que es hoy.